El sentido de la vida es,
hacia la muerte.
Saber que eres intrascendente,
la certeza de incertidumbre
con la ilusión de no serlo,
de alguna forma imaginaria.
Imaginar que existes
sólo y solo en
el presente que se detiene
un instante en tu mirada,
sin volver atrás,
sin ver adelante.
Y así la vida parece ser
un contratiempo sin sentido